El joven defensa de la selección de Nigeria habla como juega, con serenidad y concentración, asegurándose de formular sus respuestas cuidadosamente durante una conversación en exclusiva conFIFA.com en la que no pierde la sonrisa.
El jugador del Chelsea se ha consolidado como un favorito de la afición durante su cesión al Middlesbrough, en la segunda mitad de la temporada 2013/14: “He disfrutado de veras mi estancia en el Middlesbrough”, afirmó Omeruo. “Sabía que si tenía la oportunidad de jugar, conservaría mi puesto. Me gustaría dar las gracias al club, y al entrenador en especial por creer en mí y hacerme jugar. Estoy contento por no haberle defraudado. Sabía que tenía que jugar partidos para estar a punto para el Mundial y también para entrar en la lista de convocados. Ha sido una temporada muy buena para mí”.
El entrenador del que habla es Aitor Karanka, que hizo las delicias del Santiago Bernabéu en su etapa de jugador, ganando 3 Ligas de Campeones de la UEFA como defensa del Real Madrid. “Es fácil jugar a las órdenes de un entrenador que ha jugado en el eje de la defensa”, explicó Omeruo. “Y afortunadamente, tengo esa misma suerte en la selección [con Stephen Keshi]. Recibes consejos de ellos sobre cómo deberías jugar”.
Omeruo recibió unos cuantos consejos en el fútbol holandés tras fichar por el Chelsea en enero de 2012, pues inmediatamente fue cedido casi año y medio al ADO de La Haya; una experiencia que considera fue vital para que llegase a ser internacional con Nigeria.
“Creo que muchos de mis avances tuvieron lugar en el fútbol holandés”, resaltó Omeruo. “Allí estaba a las órdenes de un buen entrenador, a quien le caía bien y le gustaba mi forma de jugar. Me hizo jugar en una posición en la que antes no sabía cómo jugar [lateral]; y fue una experiencia muy positiva. Eso es lo que me llevó a entrar en la selección nacional”.
Aquellas actuaciones en la Eredivisie holandesa, así como su sensacional contribución a que su país fuese finalista en la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA 2009 y cuartofinalista en la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA 2011, dieron que pensar a Stephen Keshi con vistas a la Copa Africana de Naciones 2013. Y Omeruo aprovechó su oportunidad plenamente...
“Fue increíble”, comentó Omeruo, sonriendo. “Era mi primera presencia con la selección [al principio del campeonato], y luego estábamos levantando el trofeo. Fue un día que jamás olvidaré”.
Anular a Messi, arengas de Keshi
Ese título continental significa que Nigeria encarará el Mundial como campeona de África, al igual que hizo hace 20 años. Como en las ediciones de 1994, 2002 y 2010, las Súper Águilas han quedado encuadradas en el mismo grupo que una de las grandes potencias sudamericanas, Argentina. Irán y la debutante Bosnia-Herzegovina completan el cuarteto.
Ese título continental significa que Nigeria encarará el Mundial como campeona de África, al igual que hizo hace 20 años. Como en las ediciones de 1994, 2002 y 2010, las Súper Águilas han quedado encuadradas en el mismo grupo que una de las grandes potencias sudamericanas, Argentina. Irán y la debutante Bosnia-Herzegovina completan el cuarteto.
“Recuerdo el Mundial de Sudáfrica”, afirmó Omeruo. “Fue una decepción que no saliésemos airosos del grupo. Tendremos que jugar por los aficionados nigerianos, porque nos brindaron un recibimiento grandioso cuando ganamos la Copa Africana de Naciones. Nos demostraron cuánto aman el fútbol y lo mucho que nos apoyan, así que tenemos que jugar bien por ellos”.
“Estoy deseando que llegue el partido contra Argentina. Haremos todo lo posible por mantener nuestra portería a cero. Será difícil, pero tenemos que conseguirlo. Son los mejores jugadores del mundo, y tenemos que demostrar nuestra calidad plantándoles cara. Pero antes que nada, tendremos que asegurarnos de sumar el pleno de puntos en los dos primeros partidos”, aseveró.
Ante la Albiceleste, uno de los retos se llama Leo Messi. Omeruo ya está haciendo los deberes: “Le veo mucho por televisión. Intentar pararle va a ser un esfuerzo en equipo. Todo el mundo tendrá que mostrarse positivo y concentrado al 100% en el partido”, resaltó.
Con una Albiceleste que podría alinear conjuntamente a Messi, Gonzalo Higuaín y Sergio Agüero, la zaga nigeriana tendrá que estar particularmente atenta. La buena relación de Omeruo con su compañero en el eje de la defensa y con su seleccionador debería facilitarle la tarea. “Mantengo una buena amistad con Godfrey Oboabona fuera del campo; hablamos por Skype a veces”, explicó. “Antes de ir a la selección, coincidí con él en la liga nigeriana, con el Sunshine Stars”.
“La mayoría de las veces, antes de los partidos Stephen Keshi nos da consejos a ambos aparte. Trata de mentalizarnos y motivarnos lo más posible. Además de eso, es como un padre que nos aconseja. Es una persona genial para jugar a sus órdenes”, recalcó.
Y después del Mundial, ¿qué le tiene reservado el futuro al joven defensa después de Brasil? “Habrá que esperar a ver qué pasa”, afirmó Omeruo. “Estaría bien volver al Middlesbrough; hay un buen ambiente, con buena gente alrededor. Y me gusta el entrenador. Aunque lógicamente, habrá que ver cómo se da el Mundial. Mi máxima prioridad es quedarme en el Chelsea: jugar en los entrenamientos con John Terry, Gary Cahill y David Luiz. Quiero meterme ahí dentro, intentar aprender de ellos y corregir cualquier cosa que no esté haciendo bien”.
La concentración y la dedicación de Omeruo a la hora de aprender de los demás son rasgos admirables y, si logra contagiar su entusiasmo y su ambición a sus compañeros de selección, Nigeria podría ser el primer combinado africano en alcanzar las semifinales de la máxima competición del fútbol mundial. “Espero que lleguemos a la final”, respondió Omeruo al preguntarle hasta dónde llegará su selección en Brasil. “Pero creo que al menos a semifinales”.
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